




Sentirme llena
Elizabeth Núñez
He olvidado cómo sentirme llena,
de tanto masticar silencio
y saborear profundidades vacías.
De medir el cariño en centímetros (al amor en decimales)
y adorar la sombra de mi cuerpo
cuando encajo mis uñas en una piel
que ya no quiere sentirme.
De tanto entretener labios hambrientos
y prometerle al siguiente amante
la eternidad que existe en el aire atrapado al cerrar un botón.
​
Porque en un sueño me atraganto con semillas,
y crece un árbol de limón en mi estómago.
Y cuando nadie dice nada,
se escuchan las raíces brotando en mis entrañas.
Me despierto con el miedo de haber creado vida para destruirla en un mordisco.
Con la angustia bajo mi lengua y entre caricias repulsivas,
dime si soy las sobras que tiro cuando nadie me está viendo.

